No suelo leer
novelas desconocidas. No suelo leer novelas ni libros ni nada que no tenga el
signo de aprobación del señor Cuervo o de alguien de confianza. Pero en este
caso eso cambia. Hace un tiempo el señor Cuervo y yo estábamos paseando por la
gran ciudad, y en eso que entramos en un lugar maravilloso, plagado de libros
(obras maestras y reinas rojas), y con nuestro ajustado sueldo, decidimos
comprar algo que nadie supiera de que iba. Algo nuevo. Algo inesperado. Así es
como Joe Golem y la Ciudad sumergida, de Mike Mignola fue a parar a mí.
La novela del género Steampunk que tengo entre manos es algo genial. La verdad, las novelas Steampunk me suelen enganchar, pero no de esta manera. Dado que quiero hacer el mínimo spoiler para incitaros a leer este buen libro, os voy a hacer un resumen de la novela.
Años 20.
Manhattan. Debido a una catástrofe medioambiental, la mitad de ésta queda
sumergida bajo 30 pies de agua, que van variando con la marea. Con el tiempo,
la parte inundada de Manhattan se vuelve inhóspita y llena de peligros. Son, en
toda regla, los grandes suburbios de Manhattan, mientras que la otra mitad (la
no sumergida) crece económicamente y prospera a un ritmo sin igual. En medio
del caos de la Manhattan sumergida, tenemos al señor Orlov, un viejo “mago” que
tiene el poder de hablar con espíritus y muertos, y a Molly, una chica de 14
años que es la ayudante de Orlov y vive bajo su custodia. Cuando el mago estaba
tratando con unos clientes suyos, empiezan a pasar una serie de extraños
sucesos, desembocando en la entrada de unos hombres con máscaras de gas en el
lugar donde estaban Orlov, Molly y sus clientes. Estos secuestran a Orlov,
matan a sus clientes pero Molly, que también iba a ser capturada, se escapa y
es salvada por un tal Joe, un tipo que es todo músculo que tiene unas extrañas
visiones que le muestran a él volviéndose de piedra. Él, Molly y un viejo
detective, el señor Church, lucharán para salvar a la ciudad de un malo muy
malote y los Hombres de Gas.
A ver, no tengo
demasiado que decir de esta novela. La historia no está mal, aunque en ciertos
puntos llega a hacerse aburrida. Pero lo que realmente atrae de esta novela es
el puñetero mundo. Si algo tiene de especial el género del Steampunk es su
ambientación, y la ambientación de esta novela es simplemente genial. Todas las
escenas, sin excepción, están detalladas al detalle (valga la redundancia), y en todas su escenario es
genial. Es como Matrix: la historia de Neo es pasable, pero los fans de Matrix
son fans de Matrix… por Matrix, por el universo. Pues a éste libro le pasa
exactamente lo mismo.
Poca cosa tengo
ya más que decir. Esta reseña se me queda corta, lo sé, pero no hay nada más
que decir. Podría comentar alguna escena, pero no lo creo adecuado. En
realidad, esta novela es una perfecta iniciación al mundo Steampunk. Todas
aquellas personas atraídas por el ambiente mecanizado de finales del siglo XIX y
inicio del XX pero que no saben cómo entrar en el género, les recomiendo
encarecidamente este para empezar. Éste mérito le doy con creces: Joe Golem es sin duda,
un buen iniciador al género.
Autor: Mike Mignola
Editorial: Minotauro
Páginas: 288
Puntuación: 8.1/10
No te imaginas lo mucho que me alegra comprobar que no soy la única que ha leído esta pequeña obra de arte. Yo también lo encontré por casualidad en una librería muy acojedora de mi ciudad, y aunque no tenía muchas expectativas con él, me maravilló el mundo que rodeaba a la historia y ese siniestro toque Lovercraftiano que acompaña a todo el libro.
ResponderEliminarUn beso
Lena desde Compases Rotos