Dije que habría
una nueva sección del blog, y el artículo sobre la película de Deadpool fue
como una especie de aperitivo para dar paso a este rincón en el que se va a
hablar de cómics. Aún no se ha decidido la frecuencia con la que se va a… “publicar”
teníamos pensado en que fuera mensual. Si os parece bien o no, nos lo decís
aquí abajo.
Pero bueno, ahora
que ya os he informado, pasemos a hablar sobre lo que dice el título que habéis
leído. Ese título tan sugerente… seguro que os esperáis que hable sobre la
caída del precio del petróleo en los países árabes, ¿verdad? Pues me temo que
os voy a defraudar y vamos hablar de Batman; en concreto: Batman Año 100 de
Paul Pope.
Os pongo en
situación, ¿os parece?: año 2039. Ha habido un asesinato de un agente federal
en Gotham, y parece que un misterioso hombre vestido de murciélago ha sido el
culpable. Cuando James Gordon se personifica en la escena del crimen, la
policía federal le impide pasar, ya que el asunto no está en manos de la
policía local. Y mientras tanto, el misterioso murciélago al que todos
conocemos como Batman, se pasea por la ciudad en busca de ayuda, dejando un
reguero de sangre (metafórico, aunque una bala le ha atravesado el costado)
detrás de sí. Creo que esto es lo esencial en esta historia, además de una
buena introducción. Ahora, si os parece bien, empecemos a diseccionar el
ejemplar que hoy tenemos entre manos.
A mí, el punto de
partida me recuerda mucho al final (y al principio) de la segunda (y tercera)
de la trilogía de Christopher Nolan, aunque este cómic se publicó un año
después de Batman Begins. Creo que en
las películas, se le logró dar un enfoque más oscuro y “trascendente”. En
cambio, en este cómic… no sé… la conspiración está más presente y quizás por
eso sea un poco más atractiva, pero creo que la manera en la que nos la cuentan
no es la adecuada, ya que no logra transmitir lo que quiere. Creo que podría
haber dado mucho más de sí. O eso era lo que creía antes de llegar al último
tercio. De golpe y porrazo, pareció que mejoraba, no sé por qué. El final es un
poco… me falta algo. No me has dado todo lo que tenías Pope, suéltalo. Quizás,
no esté totalmente a favor de este punto porque el siguiente me disgustó un porriquitín.
Una buena
historia contada en viñetas, debe ser contada con unas buenas imágenes, y si no
destacan por la cantidad de detalles y realismo, pues habrá un estilo peculiar
por el que será recordada; como Maus,
no está dibujada de una manera ultrarealista, es más bien una caricatura
sencilla pero esa es la intención, pero eso no importa cuando te dejas llevar
por la historia. Como he señalado antes, la historia en este cómic no es su
punto fuerte, pero con el dibujo ya no tenemos nada que hacer. No me ha
gustado. En un principio se podía llegar a darle una oportunidad, pero a medida
que vas pasando páginas, y páginas, te das cuenta de que parece que Pope
dibujase esto a toda prisa y sin ganas. No sé, es lo que a mí me ha
transmitido. Pero fue solo una viñeta en la que dije “basta”, en la que dije
que esto era casi un chiste. Si alguien tiene un ejemplar en sus manos o puede
hacerse con unos, que vaya a la página 101, en la última viñeta. Ya veréis
porque lo digo. Pero no todo es caos y caca de vaca en este aspecto, hay
escenas que pese a su… no estoy seguro de cómo lo definiría, pero me gustó el
dibujo, la verdad: la mayoría de escenas en las que sale Gordon fueron
francamente “agradables” de visualizar (menudo tostón de párrafo). Lo peor sin
duda: las escenas de acción. Al querer ser frenéticas, se deja llevar por la
velocidad con un par de trazos ya tienes
a Batman saltando de una azotea, y esto no está bien. (Me gustó eso de partirle
la capa en dos a modo de alas. Eso sí que estuvo bien).
Los personajes
apenas se no habla de su pasado, aunque no hace falta en la mayoría. Se nos
habla un poco sobre el de Gordon y para de contar. Pero tampoco se necesita
saber demasiado sobre Batman o sobre Robin, ¿no creéis? Pero no hubiera estado
mal algún repasillo. Pero el resto de personajes… ¿qué? ¿Mercer, Tibble, Pravdzka,
Tora y Doc? ¿No me quieres contar nada? ¿Estás seguro, Pope? ¿Sí, seguro? Vale
pues no me cuentes nada.
No os diré que
este cómic sea un despropósito como el Jack o el Jack 2.0. o no estoy
insinuando que sea un Jack 3.0. ya que no lo es. Es disfrutable. Sí, me gusta:
disfrutable. Pasas un buen rato leyéndolo. Vamos a ver, no es Watchmen o V de
Vendetta. Ni siquiera es La Broma Asesina (que por cierto, tiene como una
cuarta parte de las páginas de este y me han asegurado que es mucho más
trascendente y tiene más chicha. Con el tiempo me lo leeré), pero ¡qué carajo!
Leedlo si os apetece, y sino no pasa nada, qué queréis que os grazne… ¡ah!
Tiene un bonus con una “mini-historia” además de una especie de titulares que
complementan la historia. Un detallito que se le agradece. El bonus parece que
está dibujado con más cariño. En fin, yo ya me despido y me voy, que soy un pezao’.
TÍTULO: Batman Año 100 (Batman
Year 100)
EDITORIAL: Planeta de Agostini
AUTOR: Paul Pope
DIBUJO: Paul Pope
PRECIO: 16,95€
PÁGINAS: 240
NOTA: 7/10
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